“Ampliación de la cuarentena podría provocar una convulsión social”
26 de mayo del 2020
Instituto Peruano de Economía (IPE)
El presidente del IPE, Roberto Abusada, advierte que los protocolos establecidos por Produce y el Minsa son incumplibles y retrasarían la generación de empleo e ingresos para las personas.
El presidente del IPE, Roberto Abusada, advierte que los protocolos establecidos por Produce y el Minsa son incumplibles y retrasarían la generación de empleo e ingresos para las personas.
El viernes 22 de mayo, el presidente Martín Vizcarra anunció que el Estado de Emergencia se ampliaría hasta el 30 de junio, como parte de las estrategias tomadas para mitigar la propagación del coronavirus.
Asimismo, el mandatario enfatizó que la medida estará acompañada de la reapertura de determinados servicios que no formaron parte de la Fase 1 de la reactivación económica. Los negocios están operando nuevamente desde el lunes 25 de mayo.
Sin embargo, la prórroga del Estado de Emergencia agrava aún más a una economía en fuerte contracción y, por consiguiente, los ingresos de los peruanos que vienen siendo golpeados desde el inicio de esta medida.
Respecto a lo anunciado, Roberto Abusada, presidente del Instituto Peruano de Economía (IPE), en una entrevista para Gestión, afirmó que la ampliación de la cuarentena provocaría una convulsión social porque gran parte de los peruanos ya no cuenta con ingresos ni empleo, lo que conlleva al desacato de las normas establecidas.
Reactivación restringida
El 4 de mayo inició la primera parte de la reactivación económica, la cual se consideraron a 27 actividades económicas relacionadas a la minería, industria, construcción, servicios, turismo y comercio.
La segunda fase, iniciada el 25 de mayo, comprometió a los servicios de salud de determinadas especialidades, el comercio electrónico, servicio de reparto a domicilio, técnicos en informática, entre otros.
Con estas medidas, se busca poner en operación el 85% de la economía nacional, según lo señaló la ministra de Economía y Finanzas (MEF), María Antonieta Alva.
No obstante, ambas fases están sujetas bajo ciertos reglamentos que ralentizan el reinicio de las actividades en los sectores ya aprobados.
El economista Roberto Abusada enfatizó que los protocolos del Ministerio de Salud (MINSA) y del Ministerio de la Producción (PRODUCE) son incumplibles. Según el especialista, poner parámetros como el índice de masa corporal (IMC) o un límite de edad, genera trabas este grupo de personas, que podrían ser altamente calificados, y no podrían volver a su centro de trabajo.
¿Qué se puede hacer para mejorar la reactivación?
Para el economista, es necesario que el Estado logre trabajar de manera conjunta con el sector privado para abrir la economía de una manera más dinámica.
“El sector que pueda cumplir con protocolos razonables debe abrir, sea una peluquería o una fábrica de cemento. No podemos ir de fase en fase”, puntualizó.
También precisó que para salir de la crisis se necesita reabrir la economía, dominar al virus, y sobre todo generar confianza tanto al consumidor como al inversionista.
Medidas con sabor a populismo
Respeto a los reglamentos promulgados, tanto por el Ejecutivo como el Legislativo, para evitar la especulación y acaparamientos de los medicamentos para combatir al Covid-19, Roberto Abusada, subrayó que son medidas que buscan controlar los precios con el pretexto de defender a los ciudadanos de los bajos recursos.
Por otro lado, recordemos que una de las medidas más controversiales aprobadas por el Congreso fue el retiro del 25% del fondo individual de las AFP, un reglamento que no paso por el estudio de una comisión y el Ejecutivo no presentó ninguna observación a la norma.
Futuro insostenible
Roberto Abusada mostró su preocupación sobre el futuro que le espera a nuestro país, sobre todo por las próximas elecciones en el 2021. “Cualquier demagogo puede salir presidente y un Congreso sin mayoría; y estaremos en las mismas que antes”, sostuvo refiriéndose al adelanto de elecciones.
En cuanto al plano macroeconómico, el presidente del IPE advirtió que nuestras fortalezas no nos ayudarán para siempre. Se espera que para este año el Perú tenga un déficit fiscal de 10% a 15% del PBI y una contracción de la actividad de entre 10% y 20%.