Cerca de 34 mil apurimeños no saben leer ni escribir
Informe IPE – Chaski
La educación en el Perú ha experimentado grandes retos en los últimos años, especialmente durante la pandemia de COVID-19. Esta situación, combinada con las marcadas brechas en conectividad e infraestructura, ha resultado en deficiencias en la educación básica que no se han podido resolver hasta el día de hoy. En este contexto, ¿cómo ha sido el desempeño de Apurímac?
Resultados mixtos
En Apurímac, solo el 13.4% de los estudiantes de segundo grado de primaria alcanzó un rendimiento satisfactorio en pruebas de matemáticas y lectura, según datos del 2022. Esta cifra evidencia un claro retroceso respecto del 19.0% alcanzado en 2019, antes de la pandemia. En cambio, en el mismo periodo se han visto mejoras continuas en el rendimiento de los alumnos de segundo grado de secundaria. En 2019, solo 5.0% de los estudiantes tuvo un rendimiento satisfactorio en las pruebas de matemáticas y lectura, mientras que en 2023 este porcentaje ascendió a 7.6%.
Otro indicador educativo relevante es el porcentaje de estudiantes que asisten a clases. En 2023, la tasa de asistencia escolar en Apurímac fue de 95.4%, cifra que es menor al 96.9% de asistencia registrado en el 2022. Así, la región pasó de ser la tercera con mayor asistencia escolar en el país a ser la sexta. Aun con la caída en el último año, es la única región que ha logrado mantener la asistencia escolar por encima de su nivel prepandemia.
Nivel educativo en los adultos
Además, la región muestra disparidades en los logros educativos de su población adulta. Entre 2022 y 2023, la tasa de analfabetismo aumentó de 10.9% a 11.2% de la población mayor de 15 años, lo que significa que cerca de 34 mil apurimeños no sabrían leer ni escribir. Esta sería la segunda mayor tasa de analfabetismo a nivel nacional, solo por detrás de Huánuco (12.5%). Del mismo modo, solo el 54.7% de los apurimeños mayores de 15 años ha completado la educación secundaria. Si bien esta cifra es mayor al 52.7% alcanzado en 2022, dista mucho aún del promedio nacional de 63.3%.
Mayores brechas en infraestructura
Las brechas educativas en Apurímac están acompañadas de significativas carencias en la infraestructura escolar. En 2023, únicamente el 25.8% de las escuelas contaban con acceso a electricidad, agua y desagüe. Esta cifra es considerablemente más baja que los niveles alcanzados en 2022 (29.2%) y 2019 (34.1%). De manera similar, el porcentaje de escuelas con acceso a internet bajó de 58.4% en 2019, a 50.9% en 2022 y 46.2% en 2023.
Para cerrar las brechas de infraestructura educativa en la región, se necesita avanzar en proyectos de inversión pública de calidad. Sin embargo, en 2023 solo se ejecutó en Apurímac el 72.0% del presupuesto de inversión destinado a la función Educación en los tres niveles de gobierno, lo que equivale a S/ 219 millones. Este monto es 10.2% menor al invertido en 2022 (S/ 244 millones).
Una educación de calidad es clave para que la población de Apurímac pueda tener acceso a mejores oportunidades laborales y a mejorar su calidad de vida. De esta manera, las autoridades de los tres niveles de gobierno deben utilizar eficientemente los recursos de los que disponen para cerrar las brechas educativas de la región.
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