18 de enero del 2021
Por José Luis Capcha Arévalo – Embajador IPE de Áncash
A fines de diciembre, el Congreso aprobó la ley de control de tasas de interés, que en el corto plazo solo será una ley perjudicial en todos los sentidos para la ciudadanía. Esta norma controla las tasas de interés en el sistema bancario, es decir, tener una tasa de interés fija para los préstamos, lo cual llevaría a que muchas personas y empresas no puedan acceder a los créditos que necesitan, ya sea para inversión o consumo. Pues como se sabe, la tasa de interés es el precio que se pone al dinero, en el contexto del sistema financiero; y este se evalúa de acuerdo al riesgo que cada agente económico representa.
No se tomaron en cuentas opiniones técnicas para la toma de esta decisión; ni con la opinión favorable del Banco Central de Reserva del Perú, ni la Superintendencia de Banca y Seguro; por lo que la ley aprobada por el Congreso carece de esencia. A simple análisis es una ley carente de lógica, pensada a la apurada, por mero populismo. El proceso de inclusión financiera, que es una política urgente que se debe fortalecer a nivel nacional y que durante la pandemia se ha visto como un campo deficiente en nuestro país, retrocederá mucho, perjudicando a millones de peruanos y peruanas.
Pongámonos un ejemplo: una pequeña empresa requiere un crédito para ampliación de maquinaria. Como sabemos esta pequeña empresa está empezando sus operaciones, por lo que no puede asegurar un gran volumen de ventas, ni grandes garantías para asegurar el pago de ese crédito. La entidad financiera hará una evaluación de esta situación, revisará sus estados financieros, el capital que posee, entre otras características; al final de todo otorgará el préstamo a una tasa de interés que muestre el grado de riesgo que representa la pequeña empresa. Ahora cambiemos de escenario, e imaginemos que existe una ley que pone una tasa de interés fija a los créditos. Si la empresa no califica para este nivel de tasa de interés, no podrá acceder a su tan anhelado crédito, lo que perjudica a los proyectos de inversión. Este ejemplo se puede aplicar casi de igual manera para personas que desean solicitar un crédito de consumo.
Como se observan en estos ejemplos, en el Perú existen agentes económicos que no podrán acceder a estos créditos, se limitará la inversión y los créditos de consumo, que son fuentes importantes de consumo en nuestro país, y se verán duramente golpeados. Así que, al realizar un análisis técnico, nos percatamos que es esta ley aprobada por el Congreso es muy peligrosa para el crecimiento y desarrollo del país. Esta ley excluye a una gran parte de la población, incluyendo a muchos sectores económicos. Es una ley que EXCLUYE de manera INCLUSIVA.
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